Empieza la temporada

Debe ser algo parecido a lo que sienten los osos cuando salen de sus cuevas después de todo el invierno... El día que te pones el bañador y vuelves a la playa es estupendo.
Notas que te sobra la ropa, te rebozas en la arena, juegas a apretujarla en tus manos como si la abrazases de nuevo, te bañas aunque el agua esté fría y te miras el cuerpo tan blanco una y otra vez descubriendo pecas nuevas, moraduras...
Este año además hemos mirado una y otra vez lo chula que es nuestra nueva muñeca. Es la primera que tenemos en biquini y no le falta nada. Lleva bolsa, visera, crema, libro y hasta toalla. ¡Todo lo necesario para ir a la playa!
Por cierto, todavía no tiene nombre, esperamos vuestras sugerencias a través de los comentarios.